En el paraje rural de Cruz de Caña, a casi 5 kilómetros monte adentro, es posible encontrar una escultura de más de 2 metros tallada en madera, conocida como el «Santo Grande». Ubicado en el fondo de una humilde habitación de adobe, la escultura tallada en madera es el lugar elegido por los nativos del lugar para elevar sus plegarias o agradecimientos por los favores realizados.
Este templo sagrado data de más de cien años de antigüedad y según cuentan los pobladores muchas leyendas y mitos rodean la historia del querido Santo:
Las ruinas que se encuentran en el lugar son de la capilla nueva que le hicieron pero al querer sacar al santo de su lugar la capilla se vino a bajo, y en otra oportunidad hace mas de 20 años las autoridades municipales quisieron trasladarlo al pueblo de La Paz pero sin éxito debido al reclamo de los vecinos que se opusieron a q sea saqueado su espacio sagrado.
Si bien se suelen realizar largas caminatas hasta aquí, sobre todo en Semana Santa, es un lugar sagrado que lejos está de querer ser turístico por pedido de los habitantes, es el santo que protege a Cruz de Caña y así quieren que siga siendo.
Luisina Guardia